¿Alguna vez te has detenido a pensar en cómo tus pensamientos pueden estar limitando tu potencial? La mayoría de nosotros tomamos decisiones basadas en nuestro pasado, y esto nos lleva a ser esclavos del Síndrome del Espejo Retrovisor (SER).
Este síndrome se refiere a la creencia de que lo que fuimos en el pasado es lo que somos ahora, y que nuestras decisiones están limitadas por nuestras experiencias previas. Si eres un afectado del SER, probablemente te encontrarás rechazando oportunidades nuevas porque nunca antes las has experimentado.
Otra razón por la que no alcanzamos nuestro potencial es nuestra tendencia a aislar eventos, es decir, tratar los sucesos de nuestra vida como si estuvieran desconectados del resto, cuando en realidad todo está interconectado. Por ejemplo, quizás pienses que está bien saltarte tu sesión de ejercicios hoy, ya que puedes hacerlo mañana sin problema. Pero en lugar de ser una decisión que solo afecta ese momento, estás afectando la persona en la que te estás convirtiendo.
El autor y empresario T. Harv Eker destaca la importancia de este hábito en su libro Secretos de la Mente Millonaria, cuando afirma que “cómo haces cualquier cosa es cómo haces todo”.
Si miras los eventos de forma aislada, eres más tolerante contigo mismo y los eventos que crees que son simples excepciones se convierten en la norma. Como resultado, tu capacidad para alcanzar tus sueños se ve limitada y solo logras lo que tus excusas te permiten.
Si deseas crear la vida que quieres, necesitas cambiar la forma en que piensas. Obsesionarse con el pasado y hacer excusas solo obstaculiza tu éxito. Aprende a dejar ir las creencias limitantes y enfocarte en el presente para abrirte a nuevas oportunidades y alcanzar tu verdadero potencial.
